jueves, 2 de septiembre de 2010

POEMA ABIERTO A CIERTO PERIODISMO

UN PERIODISTA, AHI, A LA DERECHA

Alma perdida en oscuros laberintos /
Conciencia amarrada a ajenos destinos /
Pasados prometedores no cumplidos /
Alianzas estériles que saben a muerte /
¿Vale la pena ese espejo de oro? /
Si no ves tus ojos /
Tu rostro /
Extraviado entre fantasmas /
30 mil luces fueron segadas /
Entonces callaste /
No viste /
No quisiste saber /
El silencio /
Fue salud para pocos /
Los ríos cuentan la historia /
En rondas infinitas /
Frente a la catedral de los cómplices /
Mentiras cotidianas en las páginas uniformadas /
No pudieron con la verdad de los pañuelos /
¿Vale la pena la pantalla estelar? /
30 mil almas germinan vida /
Atravesando el asfalto /
Y los indiferentes micrófonos /
La conspiración asesina se derrite de a poco /
El calor fraternal cumple su rol /
No hay engaños eternos /
¿A cuánto cotiza hoy el silencio? /
¿Y la mentira? /
¿Llena tu mesa? ¿Tu garaje? /
¿Paga tus vacaciones? /
¿Quedará dignidad en esa cuenta abultada? /
¿Acaso no tiñen rojizo esos billetes? /
Cuando empezaste, hace tiempo /
¿Era este tu sueño? /
Apañar genocidios en horarios centrales /
Trastocar realidades /
Denigrar torturados /
Aceptar violaciones /
Negar lo evidente /
¿Vale la pena el precio pagado? /
A nivel autoestima, digo /
Si es así lo lamento /
Creí ver un alma perdida /
Una conciencia amarrada a un ajeno destino /
Pero no /
Era el tuyo /
Al igual que al de tanto asesino de sueños /
Con el soñador incluido.

Tato

HERMOSA BATALLA POR EL PODER

PERIODISMO INDEPENMIENTE. LA OPOSICION GENUFLEXA.
CORPORACIONES. GOBIERNO Y PODER.

Ya no existen dudas que estamos frente a una disputa de poder.
Disputa que se hizo evidente a partir del envío al Congreso por parte del Gobierno Nacional de la “resolución 125”.
Pelea que se ha ido profundizando hasta este presente rico, apasionante. Que moviliza y compromete.
Que ha dividido aguas como hace tiempo no sucedía.
¿Qué es lo que ha transparentado esta lucha?
¿Por qué se hizo notoria en la superficie, ante cada medida, desde aquella renombrada votación “no positiva”?
Porque desde que recuperamos la democracia en 1983, todos y cada uno de los presidentes elegidos por el voto popular, se han conformado con ser gobierno.
NUNCA DISPUTARON EL PODER CON EL SITEMA.
Se movían dentro de los estrechos márgenes que las corporaciones les permitían.
Cuando esos gobiernos amagaban con alguna medida que rozaba los intereses y/o privilegios de alguno de esos grupos, estos respondieron siempre con premura. Montando alguna operación contra el osado funcionario.
Por supuesto, la medida naufragaba en el mar de la burocracia legislativa. O quedaba perdida en algún cajón gubernamental. O se extraviaba el expediente en algún juzgado.
O el que quedaba en el olvido era el político. Como aquél legislador que durante el gobierno del doctor Alfonsín presentó un proyecto de ley de Radiodifusión. Era senador de la nación.
Si alguien recuerda su nombre, les ruego que me lo hagan llegar. Creo que era de la provincia de La Pampa. Si mal no recuerdo era Ricardo Laferriere.
Ahora, estas mismas corporaciones se han encontrado con un gobierno (en realidad desde Mayo de 2003, ya son dos) que comprendió el mandato popular. Que sin poder, no hay gobierno posible. Gobierno que defienda los intereses de las mayorías. Porque de los otros tuvimos demasiados.
Así es, que entonces, en esta transparente disputa planteada hay dos líneas perfectamente delimitadas. Con sus correspondientes actores. Protagonistas y de reparto.
De un lado el gobierno democrático, con sus funcionarios, votantes y militantes. Legisladores, artistas, intelectuales, trabajadores, periodistas, deportistas. Todos protagonistas. En la primera línea de defensa de un proyecto nacional y popular. Que con defectos y carencias está en el rumbo de las mejores luchas populares.
Del otro lado, salvo honrosas excepciones, una oposición teledirigida por el “capo” del monopolio Clarín y sus defensores mediáticos. Periodistas, comunicadores, legisladores, intelectuales y dirigentes “abonados” a los canales de difusión del sistema de poder en disputa.
Estos dirigentes políticos, que prefieren ser actores de reparto en el gran escenario montado por la corporación mediática, son quienes aspiran a ser gobierno a partir del 2011.
¿Alguien puede llegar a imaginarse a estos pigmeos de la política tomando una sola medida gubernamental, sin consultar antes a estas corporaciones que hoy les dictan cada palabra?
¿Qué independencia pueden proclamar para defender leyes laborales en defensa del trabajador y no de los patrones?
¿Qué defensa de la soberanía podrán aducir cuando se desesperan epistolarmente ante embajadas y gobiernos extranjeros?
¿Qué libertad aducirán si son esclavos de los dueños de los micrófonos y las cámaras salpicados de sangre argentina?
Es sabido que los espacios de poder no se regalan. Así como la libertad y la soberanía tampoco.
Se lucha por ellas.
En esa batalla estamos. Junto a este gobierno que ha sabido interpretar las demandas populares.

Tato